Seccion Pueblos
Nación Zápara Lucha por la Supervivencia
Publicado en Pueblos el 27/07/2010 por adminLos Záparas, antaño una de las poblaciones más numerosas del oriente (se estima en 20.000 miembros a principios del siglo XX), son en la actualidad uno de los grupos indígenas más reducidos, sino el más reducido, de toda la amazonía ecuatoriana. Diversos factores contribuyeron a la reducción drástica de la población Zápara durante el pasado siglo, entre ellos la esclavitud y las enfermedades causadas por la fiebre del caucho que implicó la llegada de colonos a los territorios indígenas, así también como de misioneros a partir de los años 50. Como estrategia de supervivencia, los Záparas iniciaron una política matrimonios interétnicos, de manera frecuente con nacionalidades más numerosas en la amazonía, con lo que se consiguió estabilizar e incluso hacer crecer demográficamente al grupo, aunque eso supuso la práctica desaparición de la lengua Zápara, pues los Záparas tendieron a sustituir su lengua original por la nueva lengua para evitar ser objeto de burla y marginalización. En la actualidad, no más de 8 personas, todas mayores, conservan aún la lengua con dificultades, y para una cultura como la Zápara, de tradición y transmisión únicamente oral, esta realidad implica claramente una situación grave de amenaza para su supervivencia. Para los Záparas, pues, la recuperación del idioma, base de la identidad, y la revitalización de la cultura Zápara en todas sus manifestaciones es una de sus mayores e ineludibles prioridades.
Actualmente, la población del pueblo Zápara en el Ecuador se estima en unos 400 individuos, entre Záparas y familiares directos aunque sean de otras nacionalidades. Además, existen unos 500 Záparas más en el Perú, de manera que la población Zápara total estaría sobre las 900 personas. Se trata pues, de una nacionalidad que ocupa territorio en dos países, y que la guerra del 1941 entre el Perú y el Ecuador ha mantenido separada durante más de 60 años.
Es precisamente la UNESCO quien, en mayo del año 2001, reconoció a las tradiciones orales Záparas como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad, reconocimiento que contribuyó y contribuye a la difusión y divulgación de la Nacionalidad Zápara a escala mundial, además de recalcar la importancia de la conservación de la cultura Zápara como muestra de la diversidad cultural en el mundo frente al peligro de desaparición en que se encuentra, como la mayoría de culturas indígenas.
La creación de la Dirección de Educación Trilingüe de la Nacionalidad Zápara (DIENAZE), y la organización del primer encuentro Binacional Ecuador- Perú de la Nacionalidad Zápara en el año 2001, que supuso el reencuentro de las familias Záparas de ambos lados de la frontera después de 60 años de separación y aislamiento, son otros logros importantes de la ONZAE, que lucha desde su creación para la reunificación de todos los miembros de su pueblo.
Como el resto de nacionalidades indígenas del Ecuador que caminan juntas para defender sus derechos, mano a mano con las nacionalidades indígenas de la amazonía vertebrando un movimiento indígena cada vez más fuerte, los Záparas son un pueblo que no ha descansado en su lucha por sobrevivir, conservar su cultura y su territorio y reivindicar sus derechos colectivos desde su cosmovisión, desde el mundo de los sueños y los mitos, con un pie enraizado en la selva y el otro bien firme en “el mundo de fuera”.
Aunque son muchos e importantes los logros alcanzados por la ONZAE, Actualmente NA
SE-Nacion Sapara del Ecuador-filial a la Federacion Binacional de Ecuador y Peru. Son muchos también aún los retos que enfrenta la Nacionalidad Zápara. Se continua trabajando para poder concluir el proceso de legalización del Territorio Ancestral Zápara, y conseguir el título de propiedad para la Nacionalidad Zápara.
A finales del 2001 los Záparas ecuatorianos realizaron una visita a los peruanos y se reencontraron por primera vez. Poco después se producía el primer Encuentro Binacional. De ahí salía el compromiso para realizar el segundo encuentro binacional de la Nacionalidad Zápara durante el año 2003, con varios objetivos como reencontrase con familiares, intercambiar costumbres tradicionales y formas de vida, pero fundamentalmente con la intención de poner las bases para la conformación de la FEDERACIÓN BINACIONAL ECUADOR-PERÚ DE LA NACIONALIDAD ZÁPARA. fecha que comenzaron sus dirigentes a realizar todas las gestiones pertinentes para legalizar jurídicamente a la Federación Binacional que era uno de los sueños mas importantes del pueblo zapara.
La Federación Binacional del Pueblo Zapara de Ecuador y Perú, fue creada el 18 de Junio del 2006; con Acuerdo No. 192. La misma que fue abalizada y estudiada sus estatutos en el Ministerio de Relaciones Exteriores y fue reconocido por el Consejo de Nacionalidades y Pueblos del Ecuador CODENPE.
Esta Federacion, en una organismo sin fines de lucro, creada para con la finalidad de buscar apoyo sostenibles y sustentables de todo índole para el desarrollo de la Nacionalidad Sapara de los dos países. Ya sea en Educacion, salud, Ecoturismo,Medio Ambiente, Cultural y Social, territorio entre otros.
La lucha de la Nacionalidad Zápara es para reivindicar nuestros derechos colectivos, como la propiedad de nuestros territorios ancestrales, y para gritar al mundo nuestra existencia y buscar apoyos y contactos a escala nacional e internacional para mejorar la vida en nuestras comunidades, para que podamos continuar viviendo con nuestros sueños en el territorio Zápara.
Cualquier contactos: comunicarnos a los teléfonos: 022-828966/098286-709; con Carmen Tapia o Bartolo Ushigua. FEDERACION BINACIONAL DEL PUEBLO SAPARA DE ECUADOR Y PERU
FIRMAN
CONSEJO DE GOBIERNO DE LA FEBZPEP
Declaración de Otavalo
Publicado en Pueblos el 27/06/2010 por adminLos países del ALBA asumimos esta nueva época del lado de los históricamente excluidos, pueblos indígenas, el pueblo afrodescendiente, mujeres, jóvenes, niños, niñas, ancianos, ancianas y personas con discapacidad.
Así, los Jefes de Estado y de Gobierno y Jefes de Delegación de los países que conformamos la Alianza Bolivariana de los Pueblos de las Américas – Tratado de Comercio de los Pueblos, ALBA-TCP, reunidos en la ciudad de Otavalo, Ecuador, junto con autoridades indígenas y afrodescendientes electas y designadas de la región.
DECLARAMOS que:
1. Entendemos al Estado Plurinacional Unitario en la forma como se ha dado en los procesos constituyentes de la República del Ecuador y Estado Plurinacional de Bolivia, como expresión de unidad en la diversidad, que asume una forma democrática de convivencia, expresada en
la interculturalidad que es el relacionamiento armónico entre las culturas.
2. Ratificamos nuestro compromiso con la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas que significó una victoria en la lucha por lograr el reconocimiento de sus derechos colectivos. Del mismo modo, reafirmamos nuestro compromiso con la Declaración y el Programa de Acción de Durban contra el racismo, la xenofobia y la intolerancia; así como a la Convención de la UNESCO para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial y la Declaración de la UNESCO sobre la Diversidad Cultural.
3. Reiteramos nuestro compromiso para avanzar en los procesos de construcción de sociedades incluyentes, culturalmente diversas y ambientalmente responsables, que excluyan la explotación del ser humano, en las que existan condiciones para un diálogo entre iguales y un
intercambio real de saberes, conocimientos y visiones en nuestra región.
4. Confirmamos nuestro compromiso de hacer realidad el Tratado de Comercio de los Pueblos (TCP), afirmando la soberanía de los países de la región y la construcción de un modelo alternativo de soberanía económica expresado en una Nueva Arquitectura Financiera (SUCRE, Banco y
Fondo del ALBA) para consolidar un sistema de intercambio y cooperación recíproco, solidario, participativo y complementario, que fortalezca
nuestra soberanía alimentaria.
5. Reiteramos nuestro compromiso por promover una Declaración Universal de los Derechos de la Madre Tierra en el marco de las Naciones Unidas, para que la vida en plenitud (Sumak Kawsay) sea nuestro escenario de armonía con la naturaleza, profundice la equidad y la autonomía, de modo que los ciudadanos y ciudadanas disfrutemos del uso, de la asignación y de la distribución de los recursos materiales e inmateriales de nuestras naciones.
6. Reiteramos nuestro respeto a la Madre Tierra (Pacha Mama) respaldando iniciativas como la del YASUNI ITT propuesta por el Ecuador, que se fundamenta en un mecanismo de compensación por contaminación neta evitada; llamamos a la comunidad internacional a aprobar en las Naciones Unidas la Resolución Declaratoria de Derecho Humano al Agua y al Saneamiento, propuesta por el Estado Plurinacional de Bolivia.
7. Expresamos nuestro reconocimiento a la iniciativa del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional de Nicaragua de restitución de Derechos a los Pueblos Indígenas, a través del proceso de titulación de sus tierras, mediante el cual ya se ha titulado el 20% del territorio nacional y su compromiso de continuar avanzando para lograr para el año 2011 la titulación de la totalidad de sus territorios ancestrales.
8. Expresamos que el manejo, administración y aprovechamiento de los recursos naturales no renovables corresponde al Estado de acuerdo al
interés de sus pueblos y la sociedad en su conjunto y no a uno o varios grupos o sectores sociales o económicos. El Estado garantizará la participación social y la distribución justa y equitativa de los beneficios, especialmente a favor de las comunidades en donde esos recursos naturales se encuentran y buscará, en armonía con la Naturaleza, minimizar los impactos ambientales y sociales adversos que
generen.
9. Nos comprometemos a fortalecer las políticas públicas para el acceso a la salud, educación, empleo y vivienda prioritariamente para los más excluidos, y promover políticas en beneficio directo de los pueblos indígenas y afrodescendientes.
10. Reafirmamos el compromiso para promover la cooperación entre los países miembros del ALBA relacionada con el rescate y protección de
nuestros patrimonios, culturas y conocimientos tradicionales de los pueblos indígenas y afrodescendientes.
11. En este marco de respeto y garantía de los derechos consuetudinarios, y en consideración a que la hoja de coca es un elemento central de las culturas Andino Amazónicas, los países del ALBA ratifican la solidaridad y apoyo en el propósito de revalorizar la práctica ancestral del masticado de la hoja de coca (akullico), eliminar su prohibición en los instrumentos internacionales y retirar a la hoja de coca de la lista 1 de la Convención Única sobre Estupefacientes de 1961.
12. Reconocer los logros del Proyecto Grannacional ALBA Cultural y de la Empresa Grannacional Fondo Cultural del ALBA, para transformar a
nuestros países en sociedades interculturales, diversas, tolerantes, respetuosas, incluyentes, con Estados en los que se garantice el pleno ejercicio de los derechos económicos, políticos, sociales y culturales, que contribuyen al fortalecimiento de sociedades libres de racismo estructural.
13. Comprometidos con la defensa de los Derechos Humanos y de los procesos culturales ancestrales, ratificamos que en las jurisdicciones en las que se aplique la justicia consuetudinaria, los usos y costumbres deberán respetar las normas constitucionales y legales vigentes.
14. Nos comprometemos a que un encuentro de autoridades indígenas y afrodescendientes electas y designadas del ALBA, se realice anualmente
como un mecanismo de encuentro y diálogo intercultural.
15. Instamos a constituir un mecanismo de encuentro y diálogo entre pueblos y comunidades indígenas y afrodescendientes, en el seno del Consejo de Movimientos Sociales del ALBA.
Otavalo, 25 de junio de 2010
El Valle de los Diaguitas
Publicado en Pueblos el 17/06/2009 por adminA la llegada de los españoles, se supone los diaguitas eran unos 25.000 ubicados en los distintos valles. Población que rápidamente fue bajando, producto de guerras, traslados y mestizamiento. Actualmente el patrón demográfico diaguita debe reconstruirse. Históricamente esta etnia se localizó en los Valles Transversales, actuales regiones de Atacama y Coquimbo, estos valles son producto de los cordones andino costeros que va de este a oeste al igual que los ríos, los valles transversales los ubicamos desde los ríos Copiapó al Choapa. En la actualidad este pueblo ha renacido con fuerza en la provincia de Huasco y más precisamente en la localidad de Alto del Carmen, entre los valles de San Félix y El Transito, a unos 50 kilómetros al este de Vallenar.
Cómo vive la olvidada cultura Diaguita
El pueblo diaguita es muy alegre, sus fiestas y carnavales como la Challa, lo hacen único.
El estudio sociocultural elaborado por un grupo de investigadores por encargo del Gobierno Regional, revela rasgos ancestrales de este pueblo que perduran por más de 5 siglos de ocupación, evangelización, modernización y otros procesos históricos que han diezmado a este pueblo originario del norte chico chileno.
Pese a que muchos historiadores han calificado al pueblo diaguita como la cultura precolombina más avanzada del país, en la cual destacaba la orfebrería y rica artesanía. Pero inexplicablemente con la promulgación de la Ley indígena en 1992, fue obviado como pueblo originario de Chile, como si fueron reconocidos los atacameños, aymarás, collas, mapuches, rapanui, entre otros.
Para saldar esta deuda histórica, es que el Gobierno Regional de Atacama, junto a parlamentarios de la zona, presentaron una modificación legal para que la etnia diaguita fuera reconocida por la Ley Indígena, y así acceder, a una serie de beneficios, como becas, concesión de tierras, subsidios, etc.
Este proyecto fue aprobado el año pasado por la Cámara de Diputados y actualmente está en trámite en el Senado. Para apoyar esta tramitación parlamentaria es que el Gobierno Regional encomendó a la consultora especialista en temas indígenas TEPU que realizara un estudio sociocultural de este pueblo para determinar el estado actual de la etnia, y más aún, si persisten rasgos de su cultura.
Los investigadores se abocaron por 6 meses a estudiar las costumbres, cosmovisión, patrimonio arqueológico, y en definitiva la identidad indígena de los diaguitas en el valle precordillerano de El Tránsito en la provincia del Huasco, territorio donde se habitan.
Los resultados de la investigación fueron decidores: no sólo persisten numerosos apellidos de la desaparecida lengua diaguita, el Kakán, como Campillay, Huanchicay, Tamblay, Liquitay, Sulantay, Licuime, Pallauta, Seriche, Alquinta, Quinzacara; sino además que todavía, a más de 500 años de la colonización española, poseen tradiciones ancestrales como el trabajo en la tierra y el pastoreo de cabras.
Raúl Molina, el geógrafo que dirigió la investigación señala que uno de los rasgos distintivos de esta etnia es su carácter festivo, “la tradición de la fiesta como evento social, tiene raigambre desde el periodo de contacto con el hispano, como la fiesta de la Challa, los carnavales y los actuales bailes y festivales que en el verano se realizan en todos los poblados del valle”.
Ana Huanchicay, presidenta del centro cultural diaguita de Alto del Carmen, cuenta que su padre, después de una buena cosecha invitaba a todo el pueblo donde vivían, “hacíamos un asado de cabrito y se tomaba pajarete, compartiendo con todos los trabajadores para agradecer la colaboración de todos en la cosecha”.
Otros de las manifestaciones de la cultura diaguita es su relación con el territorio donde viven. Con la ocupación española, los diaguitas fueron reducidos al valle de El Tránsito, una zona precordillerana que por su difícil acceso, permitió la preservación de las tradiciones de la etnia.
Actualmente en esa zona habitan cerca de tres mil integrantes de ese pueblo y viven principalmente de la pequeña agricultura como la Chancuana y la Ñotuna, “confeccionadas en piedras y morteros hechos en troncos de algarrobo”, cuenta Molina.
Todos estos rasgos culturales hacen del pueblo diaguita único. Una etnia que ha sabido sobrevivir a siglos y siglos de indiferencia.
Fuente: http://www.biblioredes.cl